Imbéciles

No caigamos en la Imbecilidad

  Allá por febrero de 2025 el Andis a cargo de Diego Spagnuolo publicaba una resolución que trataba a los discapacitados como "imbecil" , "idiota" o "retrasado mental". Sin duda alguna esos conceptos son absolutamente arcaicos pero los mileistas salieron a defender al gobierno con argumentos muy frecuentes que ya se usaban esos términos o que el gobierno anterior tal o cual cosa, como que cualquier desacierto del actual gobierno es justificable por las horripilancias previas.

  Lo de Spagnuolo no era algo aislado, a ello se agregaba los insultos del Presidente y que tuvo un punto culminante cuando el León atacó a un chico autista tildandolo de kirchnerista. Su coro de aduladores salieron a atacar a la familia sin reparar que se trata de un niño con un problema de salud.

 Parece que los imbéciles no son los discapacitados sino todos aquellos que no actuan como ciudadanos y no separan la distinción entre ideologias y discapacidades.

 No es cuestión de atacar a nadie sino respetar las dificultades individuales de cada uno.

 El Kirchnerismo ya habia hecho un festival con los fondos de la Discapacidad, no tuvo reparos en otorgar pensiones por discapacidad como si la Argentina hubiese sufrido una guerra y el comportamiento de sus seguidores ha sido de apañar el despilfarro y el robo.

 Otra vez la corrupción se manifiesta y ahora en el gobierno libertario.

 Mileistas actúan nuevamente como los Kirchneristas defienden lo indefendible y olvidan actuar como Ciudadanos, ejercer los derechos como tal y cumplir con sus obligaciones.

 Ambas formas de pensar prescindiendo de ser Ciudadanos nos llevará inexorablemente al fracaso.

Fracaso que arrastramos hace lustros.

Como ciudadanos nos debe preocupar terminar con la corrupción, defender la libre expresión de todo aquel que se manifieste legitimamente, que en lugar de que por mantener las cuentas fiscales contenidas se permitan una salida de divisas en turismo al exterior en lugar de aplicarlas en la inversión productiva, tratar de mejorar los recursos de jubilados, de médicos que sólo en las catástrofes recordamos, en mejorar la educación pública unica forma de poner equidad en una sociedad devastada por los populismos.

 Preocupemonos por lo importante, como Ciudadanos y no como fanáticos de una u otra facción y no tener vigas en nuestros ojos porque solamente no defendiendo lo indefendible evitaremos nuevos fracasos. 

Gabriel, el Contador de Historias